Los Murales de Desiderio Hernández Xochitiotzin, ubicados en el Palacio de Gobierno de Tlaxcala, son una de las expresiones más poderosas del muralismo mexicano. Estos murales, realizados entre 1975 y 1979, relatan la historia de Tlaxcala desde tiempos prehispánicos hasta la conquista y la independencia. Con un estilo único, Xochitiotzin combinó elementos tradicionales y modernos para contar la historia de su tierra, destacando la resistencia de los tlaxcaltecas frente a los conquistadores y su papel fundamental en la historia de México.
El artista utilizó su obra para transmitir un mensaje de identidad y orgullo regional, incorporando símbolos indígenas, escenas de la vida cotidiana y figuras históricas clave. Los murales no solo son una obra artística de gran valor, sino también una lección visual sobre la historia y la cultura de Tlaxcala. Cada uno de los paneles refleja una faceta distinta de la evolución de la región, y al estar en el Palacio de Gobierno, se ha convertido en un testimonio visual que sigue vivo en la memoria colectiva de los habitantes de Tlaxcala.